Dos novelas con las que la autora de culto Fleur Jaeggy inició su andadura, reunidas en un volumen.«Una escritora maravillosa, brillante, salvaje.» Susan Sontag «Duración de la lectura: aproximadamente cuatro horas. Duración del recuerdo, y de la autora: el resto de la vida.» Iosif Brodsky (sobre Los hermosos años del castigo) «Fleur Jaeggy va siempre a lo esencial y, como si tuviera bien aprendida la involuntaria lección de Kafka, consigue muchas veces en una sola página, y a veces en una sola línea, que se haga visible de golpe, a modo de repentina revelación, la estructura desnuda de la verdad.» Enrique Vila-Matas «Profundamente turbadora, obstinada en sus temas, con personajes que alternan un cruel nihilismo y un falso candor infantil, un instinto de huida de la vida normal y de las reglas asfixiantes de lo cotidiano, así es Fleur Jaeggy, cuyo nombre es comparable a los de la brasileña Clarice Lispector y la austriaca Ingeborg Bachmann, las autoras posiblemente con una obra más potente y original de la segunda mitad del pasado siglo.» Mercedes Monmany, Abc Cultural «Es de esas escritoras que cuentan las